martes, junio 20, 2006

Y si cambiamos el final? (Parte 3)

El guardia entonces me mira con cara de asombro. Pasa y camina hasta el final del pasillo - me dice, con voz dura y seca. Espero que se aparte de la puerta y entonces entro. El me sigue desde atrás. El lugar es un pasillo negro, iluminado por una fuerte luz violeta, lo que hace que todo lo que sea blanco resplandezca. Veo unas personas fumando que ni se enteran que yo estoy ahí. La música se escucha muy fuerte con un marcado ritmo tropical que no logro identificar. En el piso circula una espesa nube de humo blanco que me impide ver mis pies. Llegamos a un hall iluminado con luz roja. Varias personas muy bien vestidas, con un vaso en su mano, conversan animadamente mientras fuman. Espera aquí - me dice desde atrás el guardia. Lo veo desaparecer detrás de una puerta.

Mientras espero vuelvo a pensar en Carolina. Claramente hay algo en ella que me turba por completo. No logro entender por qué está jugando conmigo de esta manera. Desde un principio le dejé claro que tenía novia. Recuerdo que estaba en la playa, tirado sobre mi tumbona a la sombra de una palmera, completamente relajado después de una intensa jornada de buceo. Estaba absorto con mi lectura de Azteca de Gary Jennings, cuando sentí una voz que me decía – si te gusta esa historia, entonces deberías leer Corazón de Piedra Verde de Salvador de Madariaga.

Era ella, la chica con quien llevaba ya tres días cruzando la vista y haciéndonos sonrisas. La visión de aquella mujer vestida con un colorido bikini me provocó un estremecimiento parecido al que nos sobrecoge ante una obra de arte. Me paralizó la timidez. Ninguna imperfección la dañaba y en aquel momento la luz le daba un resplandor que jamás había visto en ninguna otra. Se asemejaba más a mis sueños que todas las que los habían suscitado. Jamás había llegado a imaginarme una mujer capaz de provocar tantos deseos. Mi imaginación no podía añadirle nada que no poseyera ya.

Me llamo Carolina – me dijo con voz segura sentándose a mi lado. Y tú, cómo te llamas? continuó. Sólo alcancé a reincorporarme y a contestar – Juan Pablo - pues ella, aprovechando mi sorpresa, continuó en tono acusador: Ya llevas tres días mirándome y no has sido capaz de acercarte a conocerme. Es que todos los chilenos son así de lentos?.

Yo estaba totalmente confundido. Solo atiné a decirle que no me había atrevido a acercarme pues tenía novia en Santiago y no me parecía correcto estar coqueteando con otras mujeres. Ella se largó a reir. ¿Y qué crees que has estado haciendo hasta ahora?, me replicó.

Carolina tenía una tez transparente y unos ojos expresivos que le impedían disimular sus sentimientos y vi claramente que los que empezaban a configurarse en su rostro no me eran adversos. Una exquisita ambigüedad se había deslizado de inmediato en nuestra conversación y parecía proporcionarle un placer que no tenía nada de inocente. Nuestro encuentro en esas circunstancias inesperadas, al menos para mi, tenía algo de maravilloso.

Así que eres un chico correcto, la perdición de cualquier mujer – continuó, haciendo un gesto de negación con su cabeza. Pero, ¿igual podemos ser amigos verdad?, me preguntó. Al final, no somos animales y podemos conversar – agregó fingiendo un candor que me puso colorado. No se molestaba en ocultar sus intenciones. Su seducción me comenzó a dar pánico. Me molestó que viniera a perturbar la quietud en que me había encerrado con María José. Sentía una total aversión contra el Juan Pablo inconstante que comenzaba a despertar en mí. Sin embargo, a partir de ese día no pude resistirme a juntarnos todas las tardes en la playa. Y aunque nuestra relación se mantuvo a una temperatura moderada, cada día que pasaba ella se introducía en mi cabeza más y más.

Así que Angel te envió – me espetó una voz ronca que me sacó abruptamente de mi ensoñación.

(Continuará...)


High and Dry

6 Comments:

At 5:57 p. m., Blogger Angel y Demonio said...

Y sigo metida...

 
At 10:44 p. m., Blogger Vale said...

mmmmmm Juan Pablo...
y Carolina y Maria José y el Caribe
que grandes contradicciones, y la mafia bordeándo a un chico muy prolijo, que bucea, quiere casarse pero que se perturba ante la belleza de una Afrodita cualquiera.
Relatas muy bien Bilintx. Eso esparabamos tus fanáticas...

 
At 1:35 p. m., Blogger mariasoledadsilva2@gmail.com said...

Se vé bien la historia...... cada vez estamos más atrapados todos tus fieles seguidores.

Qué pasará? Creo que Carolina tiene que ver en todo esto, no sé me tinca que ella tendrá un rol fundamental en la historia... éso creo.

Habrá que esperar para saber.

 
At 5:24 p. m., Blogger Anita said...

Hola Bilintx!
Tengo la idea de haber pasado por aquí.
Parece que tanto Caribe y tanta pasión que brota por estas letras, "pasión contenida", me perdí.
Y en eso estoy, luchando igual que tú contra lo que te despierta esa espectacular mujer.

Te sigo. (leyendo)

 
At 1:30 a. m., Blogger Shi Ho said...

Por ahora, sólo escuché... EXCELENTE ...No he tenido tiempo de bloggear. Y ahora lo hago por qué abuso de mi eventual soledad :)
Pero en fin, Bilintx, mañana espero regresar, portando mis jeans y agujas, por esto lares a comentar. por lo pronto, me retiro a mis aposentos a retozar.... Vez qué NO te he dejado botaO... vez..?

Bonnes nuits... monsieur Bilintx

 
At 5:47 p. m., Blogger mariasoledadsilva2@gmail.com said...

Oye bilintx me quedé pegada en lo ordinaria que fui en el último comentario del post anterior.... perdón.... si querís lo borrai, que aunque es cierto no hay pa qué decirlo.

 

Publicar un comentario

<< Home